jueves, 7 de octubre de 2010

Viaje al Hierro

Un título como este podría generar un gran documento, hablando de aquí y de allá, de diversas historias que se han oído o se han visto, pero yo sólo quiero reflejar aquí que fui y pesqué en el Hierro por primera vez.

Viajar de pesca al Hierro es un poco arriesgado, ya que todo el mundo piensa que es bajarse del barco y estar el pescado esperandote con la boca abierta para que le pongas el anzuelo a pie del vehículo, y realmente no es así.

Hay gente que ha ido y ha hecho unas pescas cojonudas, sobre todo hace muchos años (casi que como en cualquier parte) y los de los últimos años tienen un poco de todo: Los que han pescado y los que se han llevado un rosco, un rosco de los de reyes (casi como en cualquier parte también).

Yo diría que en El Hierro la pesca es más favorable... Hay menor presión pesquera y se nota.

A mí particularmente no me cogió el tiempo bueno, los 5 días que estuve el alisio estaba muy fuerte y no paró de soplar por la zona donde me quedaba pero no evitó que se echaran unos lances....

La modalidad practicada fue casi todo el tiempo la pesca de fondo, por el dia en su mayoría de veces, en casi todas las zonas de la isla, aunque resguardado en calas para que el viento no me hiciera mucho daño.

Las capturas fueron de lo más variado (sargos, cabrillas, morenas, viejas, palometas, chuchos), pero no tan abudantes como me esperaba.

Sólo tuve una picada de pez de competición, a las once de la mañana en Punta Grande con una sardina entera, la caña saltó del trípode sola y corrió por el pesquero, cuando la agarré y logré controlar un poco al animal me empezó a dejar sin hilo por lo que tuve que cerrar, partiendo dos anzulelos de morenas con una facilidad impresionante. Sólo espero que haya sido un chucho de dimensiones colosales, porque si no podría estar hablando de la pérdida del pez de mi vida....



Los pejegallos la verdad que tenían que estar presentes, supongo que es una plaga a nivel de canarias, y que se agradece por la bonita lucha que ofrecen este tipo de peces.


Las viejas eran muy numerosas, comían con gamba, a boya y a fondo, no teníamos ninguna carnada especial para ellas y aún así se pillaron bastantes.

Y la mejor pieza que salió, el único día que se practicó la pesca nocturna, y con la mala suerte anterior de haber perdido una brota que pasaba el kilo tras haberse soltado del bichero:



Un pargo de tamaño considerable.

En resumidas cuentas El Hierro es un sitio muy fructífero para la pesca, ofrece unas oportunidades espléndidas y sitios muy variados, recomiendo a todos los que sean aficionados a la pesca que pasen por allí, unos días tan sólo a probar las grandes posibilidades que nos da para coger pescado variado y de tallas bastante grandes.

Quiero agradecer a Álvaro Déniz y a José Luis "Chavalito" los consejos que me dieron para acudir a los pesqueros y todas sus recomendaciones. El tiempo no me dejó hacer mejores intentos pero estoy contento con los resultados.

También abro el blog para comentarios a petición del amigo José Luis, para que la gente pueda opinar de lo que aquí se cuenta, y que en mayor medida podamos ser todos partícipes de lo que está publicado, y prometo que se seguirá publicando, siempre con capturas y alguna que otra historia.

No se pueden insertar comentarios en la página principal de momento, la manera de publicarlos es abriendo la entrada y luego ponerlos.

Un saludo y buen pesca