Me van a permitir que ahorre en palabras ya que tengo unas cosillas que hacer y no son horas. Víctor y yo volvimos al muelle con la intención de coger unos sargos en la zona marcada con una X, pero al final sólo cayó uno. A parte del sargo en cuestión, que era de algo más que la medida, (hace tiempo que no veía un sargo de medio kilo) cayeron un par de cazones, una breca, un pulpo, un largarto un besugo y una aguja.
Aquí tenemos a Víctor sosteniendo a uno de los cazones de la noche, ¡hay que felicitarlo ya que no se durmió en el pesquero!
Aquí tenemos la aguja que casi se traga el boyarín, se escaparon dos más similares a ésta, pero desde que sacamos una del agua las demás desaparecieron.
Sin nada más que contar me despido
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